UNA VOZ EN PLURAL

Su proyecto nace de una evolución orgánica, donde cada uno mantiene su lenguaje artístico, pero converge con el otro en una visión común.

“Compartimos valores estéticos, maneras de entender la creatividad y, por supuesto, un proyecto de vida. Eso nos da una base sólida desde la que crear.”

COLOR Y FORMA: UN DIÁLOGO INTERNO

Aunque trabajan bajo una firma única, mantienen sus propias pulsiones creativas. “Ella es más del color, yo más de la forma”, dice Paul.

En esa complementariedad radica su fuerza: se alimentan mutuamente de lo que al otro le falta, construyendo un universo artístico que no borra las diferencias, sino que las celebra.

EL FRACASO COMO FORMA DE CREACIÓN

Hablan con honestidad de los momentos donde nada parece funcionar. Pero incluso ahí hay belleza.

“El error también construye”, dice Bea. “A veces lo que crees que es un fracaso, termina siendo la llave de lo que viene después.” , Concluye Paul.

En su práctica artística, permiten el ensayo, el fallo, la pausa. Todo forma parte del proceso.

VESTIR COMO QUIEN PINTA

La intención de la ropa: no como moda, sino como expresión.

“Es una forma de experimentación, como con los colores o los materiales. No compramos por comprar; elegimos pocas piezas, pero con intención.”

Entre el estudio y la vida familiar, su estilo refleja una búsqueda de autenticidad y libertad. “Ser elegante no es ir de traje. Es sentirte tú mismo con lo que llevas.”

UNA ESTÉTICA AUSTERA Y CRUDA

En su trabajo hay una búsqueda por la simplicidad material.

“Nos gusta lo crudo, lo directo: tela sin tratar, óleo con las manos. Sin intermediarios.”

Esa honestidad estética también se traslada a los soportes, los acabados, el lenguaje visual. Todo refleja una coherencia serena entre lo que son y lo que hacen.

SINTONÍA CON THE (REAL) GARCIA

En su universo, Paul y Bea comparten mucho con T(R)G: sensibilidad estética, honestidad material y una visión compartida de la belleza como resistencia.

Si surgiera una colaboración, la imaginan desde la naturalidad. “Algo que no se imponga, sino que dialogue con nuestro lenguaje. Piezas sobrias, esenciales, con alma.”

CREAR COMO FORMA DE ESTAR EN EL MUNDO

“No hay una meta. Es una forma de vida que te llena tanto que haces todo por no perderla.”, dice Bea.

Para Anton AIguabella, el arte no es solo un oficio. Es una forma de habitar el mundo con sensibilidad, belleza y atención. Y eso, en tiempos de ruido y prisa, ya es una declaración.